¡Hola a
todos! Hace mucho que no os traigo por aquí un tema nuevo para el “Yo
reflexiono” pero este verano se me ha presentado una nueva aventura librera y
quería compartirla con vosotros para ver que opináis al respecto.
La
aventura de la que os hablo es una rueda de libros. Hace unas semanas, en el
Campus Potter, evento del que ya os he hablado, organizamos esta actividad y
ahora os cuento de qué va. Una rueda de libro es un intercambio de lecturas
pero hecho a lo grande. En él, todas aquellas personas que quieran participar,
deben elegir su libro preferido de la estantería o alguna lectura que por un
motivo u otro les haya marcado, con el objetivo de compartirla.
Una vez
que todos los participantes tienen su libro, se meten todos los nombre de
aquellos que participan en una caja y de uno en uno, la gente se acerca, coge un
papel y le da su libro a la persona que haya salido, esta a su vez, se lo dará
a otro y así hasta completar la rueda. Al cabo de cierto tiempo cuando ya se
hayan leído los libros o en mi caso, cuando dentro de un año nos volvamos a
reunir, volveremos a poner los libros en circulación y terminarán en manos de
otra persona.
¿Qué
dilemas se me presentan antes esta actividad? Pues de primeras unos cuantos. Lo
primero de todo es el hecho de tener que ceder un libro tuyo al que seguramente
le tengas mucho cariño. Yo personalmente mimo mis libro hasta la saciedad y si
los presto, es bajo amenaza de muerte si no los cuidan bien. Pero claro, esta
vez se trata de dejar un libro por un tiempo indefinido, seguramente no volver
a verlo porque irá pasando de una a otra persona. Mi solución a este dilema
finalmente fue el de hacerme con otra copia del libro que había elegido. Así
compartí una lectura que aprecio mucho, pero sin renunciar a mi ejemplar.
Otro
dilema es la elección de las otras personas y aquí hay muchos campos abiertos.
Por un lado, cuando se propuso la actividad, la gente no estaba muy receptiva,
y claro, pensar en ceder un buen libro tuyo, o en comprar otro, para que luego
la gente lleve la primera birria que encuentre por casa, pues como que no. Por
eso, cuando se plantee una actividad de este tipo tiene que haber un compromiso
por parte de los participantes de llevar lecturas que realmente, hayan significado
algo para ellos, y no pillara lo primero que tengan a mano.
Pero
claro, ¿y si lo que te ha marcado es el típico best seller que todos hemos
leído? Miedo me daba que al llegar a la rueda de libro solo encontrara
ejemplares de los Juegos del hambre o de Cincuenta sombras de Grey por poner un
ejemplo. No es que no me gusten, pero el objetivo es descubrir cosas nuevas, no
el tìpico libro que está en todos los escaparates de librería. Pero una vez
dejado caer que nada de best sellers, la verdad es que la gente se portó y
llevó lecturas que realmente merecían la pena.
Puedes
encontrarte que al final, esa lectura, aunque sea buena y a la persona le haya
marcado, no encaje con tus gustos literarios, pero bueno, como experiencia
siempre merece la pena y no te ayuda solo a conocer un poco a la persona de
quién procede el libro, sino que puede ayudarte incluso a hacer grandes
descubrimientos literarios.
A mí en
la rueda me tocó un libro de aventuras del que seguramente os hable por aquí a
lo largo del año ;)
¿Qué os
parece esta iniciativa? ¿Habéis participado en alguna rueda de libros? ¿Os
gustaría?
Besitos
reflexivos ^^
Hola! Nosostros no hemos participado en una rueda de libros pero parece interesante (aunque también te surgen los miedos que has comentado en este tipo de eventos jejeje). No nos importaría apuntarnos a una =)
ResponderEliminarUn besazo!! ^^